También denominado dióxido de carbono, es un gas a presión y temperatura atmosférica. No es inflamable, es licuado, incoloro, inodoro, insípido y 1,5 más pesado que el aire. El dióxido de carbono se detecta rápidamente a concentraciones muy altas debido a que estimula la respiración (aumenta el ritmo respiratorio). Es corrosivo en presencia de humedad.
Se desprende durante la fermentación, es el producto principal de la combustión completa y es un subproducto en operaciones industriales tales como la fabricación del amoníaco sintético, en caleras y en hornos de carburos.
El dióxido de carbono está normalmente presente en la atmósfera en concentraciones del 0,03 % (300 ppm) y un poco más en las zonas urbanizadas. El CO2 desempeña un papel natural en el crecimiento y desarrollo de las plantas verdes (efecto invernadero es la anormalidad climática producida a causa del aumento del porcentaje de CO2 en la atmósfera)
Aplicaciones típicas
- Atmósferas inertes (purga, protección)
- Agente de propulsión
- Deposición CVD de silicio en microelectrónica
- Tratamientos térmicos
- Lasers